El bonsái azalea es un árbol único y hermoso con flores vibrantes que van del blanco al rojo intenso. Comenzar a cultivar un árbol bonsái como principiante puede ser abrumador, pero con la guía adecuada, puede cultivar un hermoso bonsái azalea y disfrutar de su exuberante follaje y sus impresionantes flores.

La azalea satsuki, un bonsái popular de Japón, tiene una rica historia en el antiguo arte del cultivo del bonsái. Conocida por su espectacular exhibición de flores y sus diversas formas, simboliza la paciencia, la dedicación y la belleza de la naturaleza, atrayendo a los entusiastas del bonsái de todo el mundo.

Esta guía ofrece instrucciones detalladas sobre el cultivo y el cuidado de un bonsái azalea, que abarcan la selección del tamaño adecuado y la comprensión de sus necesidades. Es adecuada para principiantes y jardineros experimentados, y proporciona información y consejos valiosos para ayudarlos a lograr flores vibrantes y un crecimiento robusto.

Guía de cuidados de la azalea (rododendro) como bonsái ( Crédito de la imagen: shutterstock.com/)

Los árboles de azalea, un subgénero del rododendro, son populares para el arte del bonsái debido a sus impresionantes exhibiciones florales, follaje denso y adaptabilidad a varias técnicas de modelado y entrenamiento. Las especies famosas de azalea, como la azalea satsuki y la azalea kurume, ofrecen numerosas oportunidades de expresión artística.

Bonsai Shop ofrece una variedad de recursos y herramientas para respaldar su viaje con el árbol Bonsai Azalea. Proporcionan una selección curada de kits de inicio, macetas, herramientas y accesorios adaptados a las necesidades del árbol Azalea, asegurando su crecimiento y salud. Su completo libro electrónico proporciona conocimientos valiosos sobre el cultivo de bonsáis, lo que le permite perseguir con confianza su pasión por el cuidado de las azaleas. Antes de comenzar el viaje de Azalea Bonsai, familiarícese con las reglas de oro para principiantes para garantizar una experiencia exitosa y placentera.

Una guía para tomar la decisión correcta:

Para comenzar su viaje de Azalea Bonsai, elija el árbol adecuado con follaje vibrante y raíces firmes. Busque señales de plagas o enfermedades como hojas descoloridas o un tronco débil. Si no está seguro sobre la salud del árbol, consulte nuestras Preguntas frecuentes sobre el cuidado de un nuevo árbol Bonsai.

El Bonsai Azalea Satsuki, famoso por sus flores grandes e impresionantes, es una opción popular. Sin embargo, la elección debe alinearse con las preferencias personales y el nivel de cuidado. Cada especie tiene requisitos de cuidado únicos, por lo que comprenderlos es crucial antes de comprar. Para obtener más información sobre las especies de bonsái más populares, visite nuestra sección de preguntas frecuentes.

La edad de un árbol bonsái es un factor crucial, ya que los árboles más jóvenes son más adaptables y más fáciles de dar forma, lo que los hace ideales para principiantes, y los árboles más viejos ofrecen recompensas estéticas inmediatas, lo que requiere más cuidado. Para obtener más información, consulte nuestras preguntas frecuentes.

El tamaño de los bonsáis de azalea, que van desde miniatura hasta grandes, debe elegirse en función del espacio disponible y el tiempo para el cuidado. Los árboles más grandes pueden requerir más mantenimiento. Para obtener más información sobre el nivel de compromiso, consulte nuestras preguntas frecuentes.

Elegir el bonsái de azalea adecuado es un viaje personal que combina preferencias personales con consideraciones prácticas. El árbol perfecto está disponible, ya sea que te atraigan las flores vibrantes del bonsái de azalea satsuki o las características únicas de otras especies. La belleza del bonsái radica en el viaje de crecimiento y cuidado, por lo que estás listo para embarcarte en tu viaje de bonsái de azalea.

Guía completa para el cuidado de los bonsáis de azalea:

UBICACIÓN:

Para garantizar que su bonsái reciba luz indirecta brillante durante 2 o más horas al día, rocíelo con frecuencia durante los meses de invierno, colóquelo cerca de otras plantas frondosas o recipientes con agua y mantenga una bandeja de humedad llena de agua para evitar que el agua toque el fondo de la maceta.

El bonsái se puede trasladar al exterior ocasionalmente, pero no durante condiciones climáticas extremas. Es mejor hacerlo en primavera, después de que las temperaturas nocturnas mínimas superen los 40 °F, en sombra ligera, protegido del viento, y volver al interior antes de que se produzcan heladas fuertes en otoño.

Riega con más frecuencia:

Las azaleas satsuki tienen raíces finas que son resistentes a la desecación y pueden morir en un día caluroso. El riego excesivo puede provocar problemas adicionales, ya que las raíces pueden morir fácilmente.

Si notas que tus azaleas se marchitan o se secan, riégalas con más frecuencia. Por ejemplo, cuando la temperatura sea de 21 °C (70 °F), riégalas una vez al día y rocíalas o rocíalas con agua 1 o 2 veces. Cuando la temperatura sea de 29 °C (85 °F), riégalas dos veces y rocíalas con agua 3 o 4 veces.

Para mantener las satsuki hidratadas, elige el lugar adecuado en tu jardín con humedad y sol por la mañana. Evita el viento o el sol directo por la tarde cuando las temperaturas superen los 18-21 °C (65-70 °F). Usa la tierra adecuada, como 100 % kanuma con yama goke o musgo de montaña, ya que las azaleas prefieren medios ácidos. Las macetas pequeñas o poco profundas pueden dificultar el cuidado de las satsuki, por lo que se recomiendan macetas un poco más grandes o profundas para un riego óptimo.

Temperatura:

Para mantener el Bonsái, manténgalo en el exterior hasta que las temperaturas bajen de los 45 °F, protéjalo de las heladas y luego trasládelo a una habitación fresca o fría entre 35 °F y 55 °F. Una vez que esté inactivo, colóquelo en un lugar protegido y cúbralo con mantillo. Tenga en cuenta que los ratones y los conejos disfrutan de la corteza suave de las azaleas.

Iluminación:

El Bonsái prospera con luz solar brillante y filtrada o medio día de luz solar directa, ya que prefiere temperaturas más frescas para su salud. El sol pleno puede marchitar las flores y dañar las raíces, mientras que la sombra ligera es mejor para su apariencia. Si bien puede tolerar el sol pleno por un corto tiempo, prefiere temperaturas más frías para un crecimiento óptimo.

Fertilización:

Para mantener la salud de las azaleas, aliméntelas cada dos semanas en primavera hasta que termine el período de floración. Use una solución de fertilizante orgánico balanceado para plantas que aman los ácidos hasta que comience la floración, luego deje de alimentarlas para evitar la pérdida de flores y brotes. Después de la floración, las alimentaciones mensuales son suficientes. A fines del verano o principios del otoño, reduzca el nitrógeno de la mezcla de fertilizantes y aumente el fósforo y el potasio para ayudar a que se formen brotes y flores para la próxima temporada.

Poda/Entrenamiento:

Las azaleas tienen ramas quebradizas y corteza tierna, lo que hace que el alambre de aluminio sea adecuado para su alambrado. Desarrollado para cultivadores japoneses, el alambre de aluminio es más suave y mejor que el cobre. La cinta de plástico o la rafia pueden proteger la corteza sensible. Es esencial realizar cortes limpios con una herramienta afilada y sellar heridas más grandes con bálsamo de laca u otro sellador. Después de la floración, retire las flores muertas en la base para evitar la formación de vainas de semillas y fomentar la aparición de hojas nuevas. El mejor momento para alambrar y dar forma es noviembre, cuando se puede realizar un trabajo importante. Se puede realizar un alambrado ligero en otras épocas, pero con cuidado.

Las azaleas son plantas quebradizas que requieren una semana de secado antes de doblarlas con fuerza. Para mantener su salud, retire las flores y hojas muertas de inmediato. Una vez que finalice la temporada de floración, retire o entrene el crecimiento anual. Pode los brotes secundarios a mediados del verano. Las azaleas responden bien a la poda dura y se les puede dar forma en varios estilos de bonsái. Se pueden entrenar en forma de árbol, con estilos comunes que incluyen raíces sobre rocas, semi-cascada, azotadas por el viento, inclinadas y verticales informales. Estos estilos lucen muy bien en azaleas de troncos gemelos y múltiples.

Macetas para bonsái a juego:

Las macetas de bonsái esmaltadas son ideales para el bonsái de azalea satsuki, un bonsái resistente al invierno. Si es posible, elija una maceta hecha a mano y resistente a las heladas. Las macetas de interior económicas son casi 100% resistentes a las heladas, pero no garantizan la resistencia a las heladas. Sin embargo, estas macetas no están garantizadas.

Las macetas de bonsái sin esmaltar son adecuadas para bonsáis de azalea más viejos con troncos gruesos, de color marrón oscuro o gris. Los bonsáis de azalea de copa redondeada encajan bien en macetas ovaladas o rectangulares, con esquinas ligeramente redondeadas. Las macetas más altas y redondas son ideales para bonsáis de azalea de estilo semicascada. Las bandejas de goteo son innecesarias ya que los bonsáis de azalea no deben colocarse en apartamentos.

Leer Más: Cuidado del árbol bonsái de pino budista (Podocarpus)

Las macetas de plástico para bonsái son adecuadas para el cultivo de prebonsáis, ya que son resistentes a las heladas y estables a los rayos UV. Sin embargo, pueden no ser adecuadas para las azaleas debido a su color marrón oscuro. Para plantas de 2 a 3 años, use macetas de plástico o arcilla, como se recomienda en Japón.

Propagación:

Las azaleas son populares por su naturaleza "coleccionable", especialmente en plantaciones de cimientos demasiado grandes alrededor de casas particulares. Se pueden cortar hasta los tocones y desarrollar cientos de brotes y ramas nuevos si se cultivan adecuadamente. Los esquejes de madera blanda tomados a principios del verano se pueden utilizar para propagar las azaleas.

Trasplante:

Las azaleas prefieren el suelo ácido, por lo que se recomienda agregar más turba a la mezcla para macetas. Tienen raíces nutritivas finas y fibrosas y pueden soportar la poda de raíces a principios de la primavera. Si se trasplanta antes de la floración, elimine todos los botones florales para evitar tensiones. Las raíces de las azaleas crecen vigorosamente y requieren trasplante y poda de raíces cada dos años. En cada trasplante, corte la parte inferior del cepellón viejo cortando un cono en el cepellón que se extienda hasta el tronco.

Guía de cuidados de la azalea (rododendro) como bonsái ( Crédito de la imagen: youtube.com )

Para evitar la pudrición de las plantas, elimine las raíces más gruesas y trasplante después de la floración, ya sea a fines del otoño o después de la floración. Quita todas las flores y los brotes restantes simultáneamente para asegurar que los brotes se abran al mismo tiempo el año siguiente. Si las flores aparecen demasiado pronto en primavera, quita los dos o tres brotes más grandes antes de que se abran para retrasar el desarrollo. Coloca la planta en un lugar más fresco y ligeramente más sombreado para evitar que se pudra. Recuerda quitar todas las flores, viejas y nuevas, y los brotes restantes simultáneamente.

PODA DE RAÍCES:

Entre marzo y mayo, tu bonsái necesita ser podado. Saca la planta de la maceta, quita la tierra alrededor del cepellón y corta 1/3 de las raíces. Coloca tierra fresca en la maceta, vuelve a plantar el bonsái y riega abundantemente. Rocía la planta y sigue las instrucciones de riego para asegurarte de que todo el cepellón esté húmedo.

Ten cuidado con los insectos y los signos de hongos:

Revisar regularmente tus árboles satsuki es crucial para mantener su salud y detectar signos tempranos de daño por insectos u hongos. Las plagas comunes de las azaleas incluyen trips y chinches de encaje, que se pueden identificar por su follaje plateado y puntos negros en la parte inferior de las hojas. Consulte "Trips y bonsáis" para obtener detalles sobre el tratamiento.

Las manchas marrones o negras en las superficies de las hojas, a menudo causadas por exceso o falta de agua, pueden indicar hongos o problemas de raíz. Estos síntomas se pueden identificar mediante una investigación en línea o una muestra llevada a un vivero o centro de jardinería local. Se recomienda una investigación más profunda para determinar la causa raíz.

Solucionar problemas comunes con su bonsái de azalea:

El bonsái de azalea, una planta vibrante, puede enfrentarse a plagas como pulgones, cochinillas y ácaros, que provocan hojas amarillentas y retraso en el crecimiento. La inspección regular y el jabón insecticida pueden ayudar a prevenir estas enfermedades. Otro desafío son las enfermedades como la agalla de las hojas y el tizón de los pétalos, que causan manchas antiestéticas en la planta. La agalla de las hojas da como resultado hojas hinchadas y descoloridas, mientras que el tizón de los pétalos da como resultado manchas blancas en las flores. Ambos se pueden controlar eliminando las partes afectadas y aplicando fungicidas adecuados.

Para identificar signos de problemas en su bonsái de azalea, busque signos como marchitamiento, hojas amarillentas y falta de crecimiento nuevo. Estos pueden indicar problemas con el riego, la iluminación o la nutrición. El cuidado de los bonsáis de azalea requiere un equilibrio delicado, y demasiado o muy poco puede dañar al árbol. Los fertilizantes específicos para azaleas, formulados para proporcionar los nutrientes necesarios, pueden ayudar a mantener la salud del árbol y promover un crecimiento exuberante durante la temporada de crecimiento.

Para cuidar su bonsái de azalea en interiores, asegúrese de que reciba suficiente luz pero evite la luz solar directa. Elija un lugar cerca de una ventana orientada al norte o al este y mantenga un nivel de humedad del 60%. Si está interesado en el cultivo de bonsáis en interiores, consulte nuestras preguntas frecuentes. Aprender a cultivar un bonsái de azalea puede parecer abrumador, pero con paciencia y conocimiento, puede cuidar su árbol. Para los principiantes, nuestras preguntas frecuentes sobre consejos de bonsái para principiantes pueden ser útiles.

El texto presenta un ejemplo real de un bonsái de azalea que se recupera de una enfermedad para ilustrar cómo se pueden abordar los problemas comunes.

Calendario de cuidados para el bonsái de azalea satsuki:

El calendario sirve como guía completa para el cuidado y el crecimiento de la azalea satsuki, una planta de bonsái muy popular en Japón. Estas plantas se han criado y seleccionado durante más de 300 años y son conocidas por sus flores de diversos colores. Si bien existen variedades de un solo color, las variedades multicolor suelen ser las más interesantes. Las azaleas satsuki son ideales para el diseño de bonsáis debido a sus hojas pequeñas y verdes brillantes, su rápido crecimiento y su capacidad para soportar la poda. Se pueden ver como bonsáis perfectamente formados durante 11 meses, pero durante un mes especial, estallan en una profusión de colores, lo que las hace destacar entre otras especies de bonsáis.

Las variedades satsuki ofrecen una variedad de tipos y colores de flores, y los cuatro tipos principales son Selfs, Fukurin, Sokojiro y Shibori. En el Reino Unido, las variedades más comunes son Kaho y Gyoten, con flores principalmente blancas con rayas rosas, blancas y rosadas en el Kaho, y Gyoten, una variante de Kaho, con flores principalmente rosas con bordes con volantes.

Satsuki, un término japonés que significa "cinco lunas", se deriva de las palabras "Sa" (cinco) y "Tsuki" (luna), que significan la quinta luna del calendario lunar oriental. Se refiere al período de floración de las azaleas Satsuki, que normalmente florecen a fines de mayo o principios de junio. Los orígenes de las azaleas Satsuki son objeto de debate, pero se derivan principalmente de dos especies: Rhododendron indicum (satsuki de río) y Rhododendron tamurae (satsuki de hojas redondas). Algunos botánicos modernos sugieren que pueden haber estado involucradas otras especies, pero los expertos argumentan que las plantas silvestres no reflejan la población vegetal original y diversa, ya que los cazadores de plantas y los jardineros aficionados han recolectado especímenes silvestres inusuales e interesantes.

ENERO Y FEBRERO:

En invierno, las azaleas satsuki están inactivas y requieren protección contra las heladas. Los árboles más viejos pueden soportar las heladas, pero los más jóvenes necesitan protección. Colocar los árboles en un invernadero frío o debajo de un seto puede ayudar a protegerlos del viento y la lluvia. Proporcione protección adicional contra las heladas con plástico de burbujas o vellón aislante. El encharcamiento es la principal amenaza para las satsuki en invierno, por lo que deben mantenerse a cubierto. Abra las puertas y las rejillas de ventilación del techo en un invernadero para permitir la libre circulación del aire y reducir el riesgo de moho y enfermedades fúngicas. El riego es esencial, pero no el exceso. Las satsuki, como otras azaleas, odian la cal y deben regarse individualmente. Si vive en áreas de agua dura, use agua de lluvia recolectada si es posible. Las hojas de la temporada anterior se han caído y, si están protegidas, elimine las hojas caídas y las que estén amarillentas. Los signos de crecimiento alrededor de los botones florales pueden indicar la producción de nuevos brotes, con hasta cinco alrededor de cada botón en una planta sana.

MARZO:

Las azaleas satsuki que han pasado el invierno están empezando a mostrar signos de crecimiento este mes, con nuevos brotes que emergen alrededor de la base de los capullos de las flores. Los árboles se pueden sacar de su cubierta en días templados y soleados, pero no de la noche a la mañana debido al daño por heladas. Hay dos períodos por temporada de crecimiento para trasplantar las satsuki: después de la floración a fines de mayo/principios de junio o ahora a fines de marzo. Si se cultiva en material joven, sin entrenar, ahora es ideal para un crecimiento de temporada completa. Si se desea un crecimiento rápido, elimine todos o algunos capullos de las flores. La alimentación debe comenzar este mes tanto en árboles jóvenes como en viejos, y las plantas de muestra deben alimentarse regularmente hasta que broten para fortalecerlas antes de la floración. Marzo también es un buen momento para el alambrado de refinamiento del crecimiento joven en los cojines de follaje.

ABRIL:

En el mes de febrero, los árboles satsuki comienzan a despertar después del invierno, especialmente si han pasado el invierno bajo cubierta. Muestran crecimiento en áreas como crecimientos similares a "chupones" de las raíces en la superficie del suelo o debajo de ella. Para evitar que las flores queden inundadas por el follaje, lo mejor es reducir estos brotes a dos horizontales a cada lado del capullo. Se recomiendan durante este mes fertilizantes formulados para plantas ericáceas, o "Biogold" de Japón, que se presenta en forma de pequeños cubos que se pueden presionar en la superficie del suelo. Sin embargo, este fertilizante solo está disponible en viveros de bonsáis. Los árboles que aún están cubiertos pueden sacarse ahora, pero tenga cuidado con las heladas repentinas, que pueden dañar los botones florales.

MAYO:

Los capullos de las flores se están hinchando y pueden mostrar color o abrirse, según las condiciones climáticas y la hibernación. Recorta los brotes fuertes para dejar espacio para las flores. Para reducir el estrés, reduce la cantidad de flores en un 30-50%. En el caso de los árboles de exhibición, quita la mayoría de las flores de la parte posterior, mientras que en las plantas jóvenes debes quitar todas las flores para lograr el máximo crecimiento. Deja de fertilizar para fomentar un período de floración más largo. Proporciona un refugio temporal para proteger los capullos y las flores de la lluvia y el riego. Este refugio también sirve como parasol para evitar que las flores se marchiten prematuramente. A medida que Satsuki crece, aumentará la demanda de agua, por lo que es fundamental proporcionar una protección y un riego adecuados.

JUNIO:

Para evitar el estrés en un árbol durante la floración, quita todas las cabezas de las flores y deja que el nuevo crecimiento se ralentice. Este es un momento ideal para trasplantar, alambrar y podar. La fertilización puede reanudarse una vez que finalice la floración, pero espera unas semanas si los árboles han sido trasplantados. Se debe tener cuidado de no regar en exceso los árboles recién trasplantados. Satsuki, al igual que otras azaleas y rododendros, produce una profusión de brotes nuevos a partir de capullos de flores viejos. Quite todos los brotes no deseados, dejando solo dos, uno a cada lado del capullo, y recorte hasta dejar dos pares de hojas.

JULIO:

Las variedades de árboles Satsuki de floración tardía pueden tener problemas de salud a largo plazo si se dejan en flor. Es fundamental quitar todos los capullos de flores, especialmente si el árbol está a punto de ser trasplantado, ya que dejar las flores tarde debilita el árbol. Los árboles Satsuki están relativamente libres de plagas, pero se deben controlar para detectar pulgones verdes, arañas rojas y gorgojos de la vid. Pueden tolerar pleno sol, pero pueden tolerar semisombra. Es esencial quitar las flores cuando el árbol está a punto de ser trasplantado.

AGOSTO:

Trasplanta y poda las plantas de Satsuki ahora, lo que les permitirá ganar fuerza para el invierno y producir los capullos de flores del año siguiente. Fertiliza y riega las plantas con regularidad. Los brotes de este año se extenderán, pero se ralentizarán, y llevarán las flores del año siguiente. Los brotes podados pueden tener brotes secundarios que crecen a partir de ellos, que producirán botones florales si son lo suficientemente fuertes. Podar la luz puede eliminar el crecimiento no deseado, pero podar en esta época del año también implicará quitar los botones florales.

SEPTIEMBRE:

A partir de agosto, se espera que el crecimiento se ralentice, lo que reduce las necesidades de riego pero asegura una alimentación continua.

OCTUBRE:

Los bonsáis satsuki tienen dos períodos de crecimiento distintos, uno antes y después de la floración. La primera oleada de crecimiento comienza en primavera y termina en otoño. La segunda oleada, principalmente agrupada alrededor de los botones florales, permanece durante todo el invierno. Sin embargo, no hay un despliegue espectacular de colores otoñales como otros temas de bonsái. La hojarasca debe eliminarse de la superficie del abono para mantener la salud de la planta.

NOVIEMBRE Y DICIEMBRE:

A fines de octubre o principios de noviembre, prepare a los árboles para el invierno utilizando un invernadero frío o cualquier cubierta que ofrezca protección contra las heladas fuertes y la lluvia constante. Evite los cobertizos oscuros o los garajes para los satsukis, ya que no son caducifolios. Proporcione ventilación e iluminación para evitar el moho y riegue según sea necesario, pero no en exceso. Estos tiempos pueden variar hasta un mes según su ubicación, ya que se basan en las estaciones del Reino Unido y del hemisferio norte.

El bonsái de azalea es un deleite floral para todos:

El bonsái de azalea es un proyecto de jardinería hermoso y gratificante que requiere una atención cuidadosa en cuanto a su ubicación, riego, fertilización, poda y trasplante. Esta intrincada planta muestra la belleza de la naturaleza y el toque humano. A pesar del tiempo y la dedicación que requiere, las recompensas son inmensas. La alegría de ver florecer el bonsái y la satisfacción de dominar las técnicas de poda y peinado lo convierten en una obra maestra viviente. La belleza radica en la belleza de aprender a cultivar bonsáis de azalea.

El bonsái de azalea simboliza la paciencia, la dedicación y el delicado equilibrio de la naturaleza. Sirve como un recordatorio diario de estos valores, lo que lo convierte en una adición significativa a su hogar o jardín. Con las instrucciones detalladas proporcionadas en esta guía, puede embarcarse en un viaje gratificante. Comprender y atender las necesidades específicas de cada árbol bonsái es clave para un cuidado exitoso en interiores. Explore otros tipos de bonsáis como el ficus o el rosa del desierto. ¡Feliz jardinería!

Guía de cuidados de la azalea (rododendro) como bonsái